ÂżEl precio? SĂ, un poco más alto. Porque fabricar bajo demanda y enviarlo directo cuesta más.
Pero aquĂ no pagas postureo ni marketing vacĂo: pagas por tener algo hecho solo para ti, sin seguir la rueda de la fast fashion.
BRAVA no es ropa. Es actitud. Es tu fuego interno bordado, estampado y listo para que lo lleves a la calle.
Creemos en la justicia social, en la resistencia y en no agachar la cabeza nunca. Vestir BRAVA es plantarle cara al conformismo y gritar, sin palabras: no me vendo, no me callo, no me pliego.
Al seleccionar una opción, se actualiza toda la página.